Aunque tenemos noticias de los primeros asentamientos célticos próximos a nuestra zona (asentamiento Capote) es en época prerromana y romana cuando destaca la cercana Concordia Julia Nertóbriga, asentamiento en el sudeste extremeño que alcanza gran esplendor consiguiendo estatuto de municipio con Julio César.
Es a partir de SU destrucción y abandono en el siglo V cuando sus habitantes se dispersan por territorios y cumbres vecinas surgiendo nuevos núcleos poblacionales.
En el caso de CUMBRES mayores hay referencias en textos del siglo XVII de una población de época romana situada más al oeste del actual pueblo, donde en una zona fértil y acuosa se asentaba lo que pudo ser el origen del actual Cumbres Mayores (AUSERA).
Con las frecuentes guerras e inclusiones portuguesas este poblado fue arrasado por lo que sus vecinos se fueron trasladando a un cerro más alto aprovechando la construcción de la nueva fortaleza en tiempos de Sancho IV formándose el nuevo pueblo alrededor de esta fortaleza y quedando bajo jurisdicción del reino de Sevilla.
Cumbres Mayores ocupa una localización privilegiada en la que se dan una serie de características climatológicas y ambientales así como peculiaridades en la flora y en la fauna que favorece el desarrollo de la micro fauna apta para la maduración del jamón.
Un proceso totalmente natural con una serie de oscilaciones térmicas con las que se consigue el ecosistema perfecto que da lugar a unos productos especiales y selectos como nuestros jamones y embutidos.
Todo esto unido a la tradición artesana en su elaboración heredada de décadas de trabajo, desde el siglo XVII y sobre todo el siglo XVIII en el sector, hace que se consigan productos que alcanzan gran calidad y sabor aptos para los paladares más exigentes.